recados a la sierra

Que dice el Kabeza, que todo va bien, que le avisen a sus jefes que ya se le acabó la machaca y el queso menonita que se llevó y que eso ha provocado que le entre con singular enjundia a los tlacoyos y a las quesadillas. Que se sacó de onda cuando llegó al puesto y pidió una quesadilla y la doña le preguntó de qué quería su quesadilla, y que él le dijo, pos de queso, es quesadilla, ¿no?. Pero no, aquí hay quesadillas de hongos (osease champiñones, lo alucinógenos aún no los ha probado), papa, flor de calabaza y hasta sesos.

También, que le avisen a sus jefecitos que ya se le pasó el apuro que tuvo por consumir tacos de dudosa procedencia. Que se está tomando los chochos homeopáticos para controlar los ímpetus esos que le dan.
Que ya fue al periódico a reportarse y ya saludó a sus compas (cuates, aquí) y que se sigue riendo el poli de la entrada cuando le avisa al editor que lo busca un tal "Cabeza" (sic).

Que ya vio a sus amigos los moneros, y hasta se lo llevaron a una cantina, pero que no se estresen, que pese a ingerir bebidas alcohólicas, no hizo ninguno de sus acostumbrados y sofisticados numeritos. Que el monero Tacho se apiadó de la cara de pollo en Kentucky Fried Chicken que puso Kabeza al no saber dónde estaba parado al salir del congal, digo cantina, a las 3 de la mañana y le dio un raid (aventón, aquí). Y que al otro día se tomó sus chochos homeopáticos que dicen en la etiquetita: "crudas".

También que el viernes pasado fue a la presentación del libro del monero-escritor Bef, que ya se conocían por medio de sus trabajos, pero no fisicamente. Y que se conocieron y que el Bef estaba celebrando su cumpleaños ése día y lo invitó a una reunión a su casa con otros moneros de comics. Y que se la pasó bien chido y se dio cuenta que los moneros políticos son más trasnochados que los comiqueros y que eso le aclaró su panorama ante la vida y que lo reflexionó casi hasta el amanecer.

Que le avisen a la señora del Oxxo que Kabeza está bien, que si no ha ido por sus cigarros no es porque se haya enfermado o fallecido, sino que está en el DF y que aquí casi no venden Marlboros de cajetilla blanda, pero que se aguanta como los machos.
Que le avisen a la amiga que quiere que Kabeza le apadrine a su chamaco, que aguante tantito que respire profundo, no haga esfuerzos y que aunque no sabe el monero qué le depara el destino en esta ciudad, él llegará y cumplirá con esa misión que le han encomendado, nomás que no reclute a ningún cura regañón ni muy mocho.

Que le avisen al hermano de Kabeza, que antes vivió aquí, que al monero le urge saber cuáles días pasa la basura, porque la guarida ya parece laboratorio de científico loco. Y que le explique cómo se prende el boiler, porque ya está un poquito cansado de bañarase con agua fría y/o helada.
Que le avisen a los papás de Kabeza que si vieron las fotos de los encuerados de Spencer Tunick, que en primer lugar no anden viendo esas cosas porque se les puede subir el azúcaro bajar la presión y en segundo lugar, que si identificaron a alguien que se parece a su retoñito, que no se alarmen; que no es él, sino un vato (mano, aquí) que se parece mucho a él.
Que no maten al marrano todavía, porque en pocos días son los 15 años de Rosita y no tenemos otro festín mas que ése. Que le digan a Hilario que no venda la troca (camioneta, aquí) porque necesitamos esos centavos para el pasaje ora que vayamos a Cuautitlán. Y que si va una tal Lupita a preguntar por Kabeza, que la entretengan en lo que él llega... (si llega).